lunes, 19 de diciembre de 2011

Historia del bastón de caramelos parte IV

En la entrega anterior se veía un bastón de caramelos con líneas grandes rojas, blancas y pequeñas rojas cada una con un significado. Pero cuando partimos el bastón de caramelos se nos recuerda que el cuerpo de Jesús fue quebrantado por nosotros. Cuando tenemos comunión, es un recordatorio de lo que hizo por nosotros. Como dice 1 Corintios 11:24 “Y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed: esto es mi cuerpo que por vosotros es partido: haced esto en memoria de mí”. Y, si compartimos nuestro bastón de caramelo y lo damos a otra persona que amamos estamos compartiendo el amor de Jesús. La Biblia dice en 1 Juan 4:7 , 8 ”Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor”. Dios mismo nos dio su amor cuando envió a Jesús a la tierra para salvarnos. Él nos ama tanto que quiere que pasemos la eternidad con él. Estamos seguros de que eso cuando aceptamos a Jesús en nuestros corazones como nuestro Salvador. Juan 1:12 dice que “12 Mas á todos los que le recibieron, á los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios” o como dice Juan 3:3 , 16 “Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. Juan 3:16 dice que ”Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”. Que en estas navidades siempre toma en cuenta que el propósito fundamental de la navidad es celebrar la llegada de Jesús a este mundo para salvarnos de la muerte eterna y cambiarla por vida y vida en abundancia. Que Jesús nazca, crezca y se haga fuerte en cada de nuestros corazones.

Historia del bastón de caramelos parte III

En la entrega veíamos un bastón de caramelos elaborado con franjas rojas que simbolizan la sangre derramada en la cruz para perdón de nuestros pecados y franjas blancas para recordar la vida pura y sin manchas que tuvo sobre la tierra. Las franjas estrechas de color rojo en los bastones de caramelo simbolizan las cicatrices que obtuvo Jesús cuando fue arrestado y azotado. La Biblia dice que fuimos nosotros curados (del pecado) porque Él sufrió esas heridas. Como dice Isaías 53:5 “Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados: el castigo de nuestra paz sobre él; y por su llaga fuimos nosotros curados”. O como se expresa en 1 Pedro 2:24 “El cual mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros siendo muertos á los pecados, vivamos a la justicia: por la herida del cual habéis sido sanados”. El aroma en el bastón de caramelo es de menta, que es similar al hisopo. Hisopo es de la familia de la menta y fue utilizado en los tiempos del Antiguo Testamento para la purificación y el sacrificio. Así se expresa en Juan 19:29 “Y estaba allí un vaso lleno de vinagre: entonces ellos hinchieron una esponja de vinagre, y rodeada á un hisopo, se la llegaron á la boca”. Como lo enfatiza el Salmo 51:7 “Purifícame con hisopo, y será limpio: Lávame, y seré emblanquecido más que la nieve”.

jueves, 8 de diciembre de 2011

El servicio a la obra de Dios y sus recompensas

Quiero compartir con los amigos/as lectores la prédica central de nuestra iglesia para esta primera semana de diciembre relacionada con el servicio a la obra del Señor y sus recompensas. Primero, una obra dedicada al servicio de Dios trae consigo un apartarse de la mala administración del dinero destinado al cuidado y alimentación de nuestra familia, alejándonos de todo tipo de vicio o consumo innecesario. Segundo, habrá recompensas en la medida en que servimos tanto en cantidad como en calidad a la obra del Señor. No importa qué tan pequeño sea tu servicio, sino que lo importante es servir. Tercero, se hace necesario permanecer en el servicio aunque no veamos las recompensas inmediatas. El Señor no deja pasar como desapercibido ningún servicio que hagamos con amor y humildad al servicio de su obra redentora de la humanidad. 1 Corintios 13 y 14 nos dice que "la obra de cada uno será manifestada: porque el día la declarará; porque por el fuego será manifestada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego hará la prueba. Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa". El Señor es fiel y nos da su promesa de: no olvidarse de nosotros, de suplir para todo lo que nos haga falta, El nos iluminará a tal punto que no necesitaremos más luz que su sola presencia, nos promete la gloria eterna, El no es injusto para olvidarse de nosotros, Dios morará con nosotros en un lugar que no habrá ni llanto ni dolor. Como dice Isaías 41:10 "No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia". El trabajo que hacemos para la obra del Señor no es en vano, por lo que debemos estar firmes y ser constantes en ese servicio a favor de continuar llevando el mensaje de amor, perdón, verdad y justicia a tiempo y a destiempo. No nos cansemos de hacer el bien, principalmente a los hermanos de la fe. Como dice 1 Corintios 15:58 "Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano". Prédica realizada por el Pastor Ricardo Vallette de la Iglesia Bíblica Cristiana los Girasoles.

sábado, 3 de diciembre de 2011

Jesús y el bastón de caramelos parte II

Antecedentes: en la primera entrega de esta historia veíamos que un bastón que sirve de apoyo y defensa para un pastor sirve de modelo para crear la historia del bastón de caramelos. Un bastón que si le damos vuelta se convierte en una J con la que comienza el nombre de Jesús. Según continúa la historia, el confitero que creó dicho bastón lo elaboró con franjas anchas de color rojo en la caña de azúcar que representan la sangre de Jesús derramada en la cruz para que cada uno de nosotros pudiéramos tener la vida eterna por medio de él. Él nos restaura y nos limpia con su sangre derramada - lo único que puede lavar nuestros pecados. Así la Biblia nos lo dice en Lucas 22:20 "De igual manera, después que hubo cenado, tomó la copa, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama". También dicho bastón posee unas franjas blancas en la caña de azúcar que representan el nacimiento de Jesús producto de una virgen y su vida pura y sin pecado. Él es el único ser humano que nunca, que nunca ha cometido un solo pecado, a pesar de que fue tentado igual que nosotros. Así lo expresa la Biblia en 1 Pedro 2:22 cuando dice: "El cual no hizo pecado, ni se halló engaño en su boca". Un bastón de caramelo adornado con franjas rojas que representan la sangre derramada por Jesús en la cruz como sacrificio para que tengamos vida eterna con franjas blancas que representan la vida pura y sin mancillas que tuvo en la tierra, que aun teniendo ocasión de pecar, no pecó. Sigamos el ejemplo de Jesús: el Salvador, el Mesías, el Cristo, el Enmanuel... que se sacrificó por la humanidad para que todo aquel que en él crea no se pierda, mas tenga vida eterna como dice Juan 3:16.